LA MONEDA EN LA BOCA DEL PEZ
¿SABÉIS QUÉ SON LOS IMPUESTOS?
Pues los impuestos son la obligación que tienen los ciudadanos de dar parte del dinero que ganan al gobierno de su país, para que éste pueda funcionar pagando las cosas que todo el mundo puede necesitar como algo básico. Por ejemplo hospitales, colegios, carreteras... que después usamos todos.
En los tiempos de Jesús también se pagaban impuestos al templo de Jerusalén. Todos los mayores de 20 años debían pagar dos dracmas de impuestos, esto equivalía a dos días de trabajo de un jornalero.
(Mateo 17:24–27)
Cuando Jesús y Sus discípulos llegaron a Capernaum, los
que cobraban el impuesto del templo se acercaron a Pedro
y le preguntaron:
—¿Su maestro no paga el impuesto del templo?
—Sí, lo paga —respondió Pedro.
Probablemente fueran a preguntar esto porque creían que Jesús no pagaba impuestos y así ya encontraban una causa para acusarlo.
Al entrar Pedro en la casa, se adelantó Jesús a
preguntarle:
—¿Tú qué opinas, Simón? Los reyes de la tierra, ¿a
quiénes cobran tributos e impuestos: a los suyos o a los
demás?
—A los demás —contestó Pedro.
—Pero, para no escandalizar a esta gente, vete al lago
y echa el anzuelo. Saca el primer pez que pique; ábrele la
boca y encontrarás una moneda. Tómala y dásela a ellos
por Mi impuesto y por el tuyo.
Y así sucedió tal cual Jesús dijo.
Pedro, como buen pescador que era, echó el anzuelo y pronto picó un pez. Y al abrirle la boca, Oh sorpresa. Allí estaba la moneda con la que Pedro pudo pagar los impuestos.
La fe de Pedro fue probada. Él como pescador sabía que era imposible encontrar un pez con una moneda en la boca. Pero sucedió. Pedro obedeció a Jesús y el milagro ocurrió.
CON ESTA HISTORIA, JESÚS DEMOSTRÓ A SUS SEGUIDORES QUE ESTANDO CON ÉL NADA TENÍAN QUE TEMER. ÉL LES PROVEERÍA DE LO NECESARIO, AUNQUE A VECES PARECIERA QUE LOS HABÍA ABANDONADO. SU FE EN ÉL SERÍA SU SALVACIÓN.
ACTIVIDADES PARA REFORZAR LA HISTORIA
ALGUNAS IDEAS MÁS PARA REPRESENTAR EL PEZ DE LA HISTORIA
¿LO QUIÉRES PESCAR TÚ?
Puedes imprimir aquí el patrón de la escama el ojo y la moneda